La leche de almendras es uno de los mejores alimentos para perder peso. Además, no tiene lactosa y es rica en antioxidantes y minerales esenciales como el potasio y el calcio.
Por su bajo contenido de colesterol, su delicioso sabor a frutos secos y alto contenido de vitaminas, es el sustituto ideal de la leche de vaca. Incluso posee menos calorías que la leche de soja.
Una de las características principales de la leche de almendras es que no posee gluten, lactosa, ni colesterol. Sin embargo, tiene la misma consistencia que la leche de vaca, por lo que se puede utilizar de la misma forma.
Junto a esto, tiene un alto contenido de vitamina E, un antioxidante natural que ayuda a prevenir el cáncer y a retrasar los procesos de envejecimiento. También, provee de vitaminas D y A, proteínas, omega 6, zinc, calcio, hierro, magnesio y potasio.
- INGREDIENTES:
- 130 gramos de almendras sin tostar y sin sal, remojadas por 8 horas (aprox. 1 taza)
- 4 tazas de agua filtrada (agua hervida)
- 2 cucharaditas de extracto de vainilla (opcional)
- 1 cucharadita de miel de abejas (opcional)
- Instrucciones
- Remojar las almendras por 8 horas.
- Botar el agua del remojo.
- En la licuadora, poner las almendras, el agua, la vainilla y la miel (si decides usar).
- Licuar por un par de minutos, hasta que el color del licuado tenga un aspecto de leche.
- Colar la leche con un colador fino o una gaza, y exprimir todo el líquido.
- Conservar la la leche de almendras en la refrigeradora en un recipiente hermético, de preferencia de vidrio.
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